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Gran Danés como raza.
En 1888 se constituyó en Alemania el primer estándar del Gran Danés. Se trata de un muy elegante. Posee una proporcionada y espigada figura. Su contextura es delgada pero eso no quiere decir que posea una musculatura bien definida.
Los criadores del Gran Danés consideran importantes una serie de medidas estándares para que la raza conserve la pureza de su apariencia física. Por ejemplo, para una competencia internacional el jurado calificará con un puntaje más alto a aquellos perros cuya estructura corporal sea casi cuadrada, en especial los machos.
Asimismo, la altura en los perros no debe ser menor a los 80 cm., en el caso de las hembras 72 cm. En cuanto al carácter, los expertos recomiendan trabajar en la personalidad del Gran Danés. Éste debe ser amistoso con las personas, amable con los niños y fiel con sus dueños.
Sin embargo, con los desconocidos debe mostrar cautela pero sin muestras de agresividad. Además, es muy importante que presente una personalidad segura. A diferencia de otras razas como el Pastor Alemán, el Gran Danés es clasificado en tres diferentes variedades de color: leonado, arlequín y negro azul.
Son aceptables pequeñas manchas blancas en el pecho. Durante una exhibición internacional el Gran Danés debe mostrar un movimiento acompasado y ágil, es decir, tanto las extremidades delanteras como posteriores deben llevar un paso armonioso.
Es considerada una falta grave en la cría de esta raza que muestre un carácter nervioso, desafiante y con falta de seguridad en sí mismo. Tampoco es aceptable que la cola tenga una curvatura, como se da en el Pastor Alemán.